20200723

Vaya manía mental... Seriedad de los pensamientos columpiándose sin el frenesí necesario de la desprovista conciencia por el peligro. Esa sensación amarga circulando entre el oído medio y la garganta. Es como un ácido que sube por el resbaloso tubo del esófago, así como a trompicones, desgarrando, con uñas ancestrales, las ganas de digerir la realidad cruda, sin sal, sin condimento.
Blanca y desabrida, apostada de frente y a regañadientes plantándome cara, un rostro sin formas sin definición y con toda la intención de robar mi imagen, con el sesgo de lo impropio y con toda la malicia de dejar adherida su semilla de dudas enraizadas en mi presente. 

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